¿Por qué es importante tener árboles en Madrid?
A Madrid le gusta tener árboles, muchos árboles. Gracias a ello, la ciudad ha sido reconocida con el título de ‘Ciudad arbórea del mundo 2020’, otorgado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Fundación Arbor Day, revalidando el galardón conseguido en 2019.
Ciudad en verde
Las cifras hablan por sí mismas. En la capital, según datos del Ayuntamiento, se plantaron 9.106 árboles nuevos durante el año pasado. Además, la ciudad cumple con los cinco estándares que requiere la organización del galardón:
- Existencia de una estructura dedicada a la gestión de masa arbórea.
- Disponibilidad de un censo o inventario.
- Definición de recursos financieros para los árboles y legislación y normativa sobre su cuidado.
- Organización anual de eventos para promocionar y concienciar sobre la importancia del arbolado.
Los esfuerzos para revalidar este título se tendrán que redoblar este año a consecuencia de los devastadores efectos de Filomena en Madrid a principios de 2021. La nevada, de entre 50 y 60 centímetros, afectó aproximadamente al 45% de los 1,7 millones de árboles de titularidad municipal. Tras un análisis de la situación, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, informó ante la comisión del ramo de que se daban por perdidos 120.000 árboles, la mayoría pertenecientes a la Casa de Campo.
Estrategia de recuperación
La situación ha obligado al Ayuntamiento a replantear su estrategia de plantación de árboles en la capital. Un proyecto que es fundamental, tal y como explica el Plan Director del Arbolado Viario de la Ciudad de Madrid, porque incluye las siguientes acciones:
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- Proteger los árboles como parte fundamental de la infraestructura verde urbana de la ciudad.
- Regenerar la población arbórea, para mantener un conjunto que aporte beneficios y sea funcional.
- Conseguir que cada árbol tenga su espacio y cada espacio su árbol. Es decir, que la renovación y la nueva implantación se rija por la correcta elección de especie y la calidad de la planta que permita un desarrollo óptimo.
- Trabajar para lograr la máxima seguridad de los árboles.
A finales de febrero, el Pleno de Cibeles acordó de forma unánime llevar a cabo un plan extraordinario para recuperar la masa arbórea perdida por los efectos de Filomena. La primera actuación acordada ha sido constituir un Consejo Asesor de Expertos Independientes para que evalúen la situación. Su función será elaborar un informe que servirá de base a la estrategia de plantación y mantenimiento de los árboles de la ciudad.
Las ventajas de tener árboles
La organización ecologista SEO/BirdLife y la Asociación Española de Arboricultura (AEA), entienden la estrategia de plantación de 2021 como “una oportunidad para planificar y gestionar el arbolado urbano como parte del entramado ecológico que permita, por ejemplo, en Madrid, afrontar los riesgos ambientales derivados del cambio climático”.
Contar con un número extenso de árboles es imprescindible para la capital, ya que, además de ser grandes aliados contra el cambio climático, ayudan a combatir la contaminación. Estas son algunas de sus funciones más importantes:
- Producen oxígeno y reducen el dióxido de carbono, favoreciendo la calidad del aire y mejorando el microclima urbano
- Embellecen la urbe y dan sombra.
- Ayudan a reducir la contaminación acústica.
- Son fuente de refugio y alimentación para las especies autóctonas de aves y otros animales e insectos.
- Ofrecen espacios, llenos de color y biodiversidad, que dinamizan los espacios urbanos más monótonos.
Un nuevo pulmón
Es necesario seguir fomentando la creación de zonas verdes en Madrid ante el futuro crecimiento de su población. De ahí la importancia de proyectos como el nuevo parque metropolitano que tendrá 137 hectáreas de superficie. Este pulmón verde conectará el Parque Regional del Sureste y las zonas verdes de la ciudad, a través de corredores medioambientales proyectados en los desarrollos del sureste.
El parque se sitúa al este del barrio de Los Cerros, que forma parte de la Estrategia del Sureste, junto con Los Berrocales, Los Ahijones, Valdecarros y El Cañaveral. El proyecto, ya aprobado por el Ayuntamiento, conecta el cerro de la Herradura con la zona de los Cantiles del Manzanares. Su objetivo es potenciar los espacios naturales, fomentando el deporte y el ocio. Para ello, se crearán sendas peatonales y ciclistas, miradores y zonas de descanso, recreativas y didácticas.
El parque metropolitano prevé la plantación de 450.000 árboles. De esta forma, Madrid contará con un nuevo pulmón verde que ayudará a compensar la huella de carbono, combatir el cambio climático y ofrecer opciones de ocio y bienestar a los ciudadanos de la zona.